Yo me río, lo que doy me representa, me delata, me defiende.
Es mi carta de presentación, mi manifiesto, mi ADN escrito en acto.
No permitas que te convenzan de que la vida no es un bumerán.
Que no te domestiqen con su lógica barata: vos sos vos,
aunque el mundo quiera uniformarte.
Cada quien arrastra su historia, sus grietas y miserias, y aun así —o por eso mismo— lo más revolucionario que podés hacer es agradecer ser un simple grano de arena
capaz de incomodar todo un desierto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario